TEXTO 1

Ana Maria Machado
“Ningún arte tiene que ser pedagógico”

Ana Maria Machado es escritora y ensayista. Brasileña de nacimiento, es referente obligado cuando se habla de literatura para chicos. Había una vez un tirano, Del otro lado hay secretos y Mi reino por un caballo, editados por Sudamericana, son algunos de sus libros. Su último trabajo, Literatura infantil, creación, censura y resistencia, escrito en colaboración con Graciela Montes, reafirma la idea de la literatura para chicos como un espacio de resistencia. No se trata sólo de la literatura para chicos, sino de la literatura en general como resistencia a la masificación y al pesimismo.

¿Usted considera que el sistema atenta contra la literatura porque representa esa resistencia?

No es que atente contra. No quiero ser paranoica. Pero el mercado trabaja y actúa en un sentido que es opuesto al del arte. Y en ese sentido, insistir en hacer literatura, en hacer arte, es resistir a una imposición del mercado.

¿Una imposición del mercado es Harry Potter?

Harry Potter hizo algo muy bueno para la lectura infantil en general, que es probar a los niños que ellos pueden leer. Ellos logran leer, tienen aliento lector para leer muchas páginas. Además, Harry Potter demuestra a los padres que ellos pueden hablar de libros con sus hijos. Eso es muy importante para que los niños lean.

¿Cómo se llega a un equilibrio entre pedagogía y arte?

No tiene que haber equilibrio. Nada tiene que ser pedagógico. Ningún arte tiene que ser pedagógico. La escuela debe democratizar el acceso a la literatura, un derecho fundamental del ciudadano, como parte de una herencia cultural. El niño tiene que saber que existen los libros. Si quiere cantar o jugar al fútbol, no importa. No necesita ser lector. No es obligatorio que lea literatura, pero es un derecho que tiene, saber que puede leer y dónde están los libros. Ese es el rol de la escuela. Lo que pasa es que hay una distorsión en el sistema escolar, y la escuela trabaja mucho con una tendencia a la burocracia. Hay un programa, hay que cumplirlo, después hay que evaluar numéricamente, darles nota... entonces, la lectura de literatura se convierte en leer para responder a ciertas preguntas, obtener la nota, y después se tira el libro. Eso transforma a la literatura en otra cosa que es materia de examen, y aleja al niño del libro en lugar de acercarlo.

¿lnternet es otro enemigo de la literatura?

Yo no creo que Internet sea un problema, yo creo que es parte de la solución. Internet es muy distinto de la televisión. Para ver televisión, basta ser analfabeto y quedarse. Internet exige que la persona lea, haga 40 opciones, y muchas veces escriba para comunicarse con otros. No es un medio básicamente de imagen, sino de palabra, como la lectura. Es difícil hacer pronósticos sobre eso, pero es muy posible que una p arte de los libros que existen puedan ser reemplazados por Internet: los libros de referencia, los libros de información. Esto es muy bueno, porque la información es mucho mejor en otros soportes y no en el libro, y además porque se talan muchos menos árboles. Existe, sin embargo, el peligro de la so responsabilidad del autor. En un libro uno sabe quién escribió algo y qué editorial es responsable. En Internet eso es imposible y es un peligro que, mientras no esté resuelto, no llevara a la sustitución.

¿Cómo se contagia el placer por la lectura?

Con el ejemplo y con la curiosidad. Si todos comiéramos con las manos, los niños no usarían cuchillos y tenedores. Ellos ven a los mayores y quieren hacer lo mismo, porque es una manera de ser adultos. Cuando ven adultos que leen, tienen ese impulso del ejemplo. Además, se fomenta la curiosidad si los adultos hablan de cosas que están en los libros. Si sólo se habla de cosas que están en la tele, los niños quieren ver lo que esta en la tele. Los dos caminos más eficientes para el fomento y desarrollo de la lectura infantil son el ejemplo adulto y la curiosidad despertada por hablar de cosas que están en los libros. Harry Potter fue un ejemplo. Todos hablaban de Harry Potter: estaba en las tapas de las revistas, en todas las publicidades, en todos los noticieros. Los niños veían que eso formaba parte del mundo de los adultos, y quisieron estar en ese mundo.

Responda em português.

Apresente as justificativas da autora para aceitar que, no futuro, desapareçam os livros de referência e os de informação.